Interacción entre estructuras litosféricas pre-andinas y sistemas estructurales andinos en la metalogénesis de los Andes Centrales.

Abstract

El margen oeste de los Andes Centrales hospeda los arcos magmáticos por subducción con mayor contenido metálico de cobre a escala global, y constituye uno de los escenarios metalogénicos más observados frente a la urgente demanda mundial de recursos metálicos. Luego de décadas de exploración e incorporar importantes avances tecnológicos, el incremento de recursos mediante nuevos descubrimientos no ha sido exitoso. En este contexto, la exploración minera global tiene la necesidad urgente de renovar paradigmas en los conceptos geológicos para revertir este déficit. En el margen oriental de los Andes Centrales han sido propuestas estructuras de escala litosférica, cuyas proyecciones en el margen occidental Andino, tendrían una correlación espacial positiva con depósitos minerales conocidos, tal como ha sido documentado en otras regiones metalogénicas como Australia y África. Este hecho establece una oportunidad de revisar los conceptos de exploración en los Andes Centrales, sin embargo, su pobre expresión en la cobertura meso-cenozoica dificulta su cartografía, y su actual definición contiene un alto sesgo interpretativo que ha impedido el desarrollo y uso de este concepto en los procesos de prospección. Esta memoria desarrolla una metodología determinística, novedosa, para la definición de zonas estructurales de escala cortical en el margen occidental de los Andes Centrales entre los 17,5°S - 34,5°S de Latitud Sur. Esta metodología considera el desarrollo de una cartografía estructural basada principalmente en los mapas a escala 1:100.000 del Plan Nacional de Geología, recopilando 30.144 estructuras, las cuales se someten a un análisis vectorial y geométrico que permite definir tres familias estructurales principales: N-S, NE-SW y NW-SE. Con los datos asociados a cada familia, se realiza una interpolación de densidad, para identificar las zonas estructurales mayores Andinas. Estas zonas, se correlacionan con una base de datos de depósitos minerales de Cu y Au compilada recientemente, y se obtiene que la proyección de las zonas estructurales NE-SW contiene el 75,5% de los depósitos de cobre y el 65% de los depósitos de oro. Por otra parte, se reconoce cuantitativamente una relación geográfica positiva entre los depósitos de cobre de clase mundial, y regiones de interferencia estructural entre las tres zonas estructurales definidas, las cuales contienen el 83,8% del tonelaje total de cobre en la base de datos. Este estudio establece que la distribución espacial de los escenarios metalogénicos fértiles en los Andes Centrales responde a un control estructural de primer orden, donde la interferencia entre las principales estructuras andinas y las zonas estructurales con herencia pre-andina, condicionaría la continuidad de los depósitos. Los resultados obtenidos en este estudio se exponen como una alternativa para el desarrollo de nuevos conceptos de exploración greenfield que ayuden a solventar la urgente necesidad global de aumento de los inventarios metálicos.