Guerra y paz en el quinientos visión eurocentrica en Erasmo de Rótterdam.

Abstract

La defensa de la paz en los escritos de Erasmo de Rótterdam constituye un pilar fundamental sobre el cual se han llevado a cabo muchos estudios, que de una u otra manera buscan agregar elementos de análisis para comprender la dimensión del pensamiento erasmiano. Esta investigación toma dichos elementos y busca llevarlos a otra esfera. Tomando las premisas antes mencionadas, este trabajo pretende indagar en el pensamiento de Erasmo en relación a la paz y su negativa a las manifestaciones bélicas impulsadas por la cristiandad, haciendo hincapié en los aparentes sesgos que evidencia el humanista en sus diálogos y elucubraciones. Dicho esto, podemos comenzar a entender la idea central que proponemos. Erasmo plantea a lo largo de sus obras una serie de consideraciones en defensa de la paz, situación que, además, incluye los cuestionamientos a la conducta de la cristiandad y sus autoridades en cuestiones éticas y morales. El planteamiento del humanista es meridianamente directo. El cristianismo, además de una creencia que involucra una visión de la existencia, significa un modo de vida, un estilo de actuar y de sentir la humanidad, digamos, una civilización. Atendida esta dimensión del cristianismo, Erasmo aboga por una suerte de retorno a las bases esenciales de la fe y el abandono de todas aquellas prácticas que tiñan de tintes sombríos al cristianismo. Estas ideas son presentadas por él en un tono evidentemente conciliador, sin abandonar la dureza de fondo que plantea en su crítica. Sin embargo, tal preocupación por la contingencia se manifiesta a ratos en términos viscerales y queda de manifiesto en muchos pasajes de sus obras, como veremos más adelante. Esto es lo que orienta a pensar que, como todo hombre enfrentado a un juicio histórico o más bien de la contingencia, cae en expresiones que dejan ver una idea un tanto arraigada en la sociedad europea: la noción de superioridad frente a la “otredad”. Tal aspecto en el pensamiento de Erasmo, se puede haber manifestado por una visión clara de la necesidad de imponer el cristianismo sobre los infieles, o bien, por una idea tal vez intrínseca en el inconsciente colectivo de la sociedad cristiana europea. Es frente a estos elementos a los que se enfrenta este trabajo, siendo precisamente los puntos señalados los que pretendemos aclarar.