Abstract:
Cada día es más preocupante la contaminación del agua, debido a la
escasez que existe actualmente de este elemento esencial para la vida. Los
contaminantes emergentes son moléculas que llegan al medio ambiente producto
de la actividad diaria del humano. En este grupo se encuentra una variada
cantidad de moléculas entre las cuales se incluyen los fármacos. Estos llegan a
las aguas residuales al ser eliminados del organismo luego de ser administrados
o desechados y como residuos de su uso a nivel industrial. Si bien la OMS indica
que las concentraciones son tan bajas que no presentarían riesgo alguno para la
salud humana, existen estudios que han demostrado que a bajas
concentraciones causan alteraciones en animales acuáticos y no acuáticos,
llevando incluso a la muerte de algunas especies. Dentro de las posibles
soluciones de este invisible pero gran problema se encuentra la bioremediación.
Ésta es una tecnología donde se utilizan organismos biológicos completos o
partes de ellos para disminuir los contaminantes de un medio. Se ha demostrado
que hongos con enzimas capaces de degradar la lignina de la madera pueden
degradar diversos contaminantes incluyendo medicamentos. En este estudio se
analiza la actividad de dos hongos, Trametes hirsuta y Trametes versicolor para
degradar diclofenaco de un medio acuoso que contenía 0.1 mg/L. Se extrajeron
muestras a las 6 y después de las 48 horas de la administración del fármaco en
el medio con el hongo. La determinación se realizó por HPLC utilizando un patrón
de diclofenaco como estándar. Los resultados obtenidos demostraron que, si bien Trametes hirsuta presenta actividad para degradar el fármaco, ésta no fue mayor
que la de Trametes versicolor, lográndose en este último una degradación del
64,7% % a las 48 horas.