Resumen:
Poco sabemos sobre nuestro patrimonio protegido y la situación en la que se encuentran luego del terremoto, ocurrido el 27 de febrero del 2010, mucho menos sobre catástrofes anteriores y eventos particulares que hayan afectado a estos inmuebles. Gran parte de estos bienes se han arruinado irremediablemente o están en etapa de perderse, esta destrucción progresiva y acelerada radica en la carencia de una postura eficaz para poner en práctica las medidas de protección y promover la re-valorización del patrimonio.
Es importante entender que es más económico proteger y conservar, que demoler
y levantar nuevamente, por lo que hacer cultura patrimonial es fundamental para
evitar pérdidas irremplazables dentro de nuestra memoria histórica, social y cultural.