Resumen:
Se realizaron encuestas in situ a propietarios de 302 perros pacientes del Hospital
Clínico Veterinario, Universidad de Concepción, Chillán para caracterizar y
relacionar 27 variables de origen animal, alimentario y ambiental como fuente de
variación para el índice de condición corporal (ICC, escala 1-5). Un 72,9% de los
perros se clasificaron con ICC óptimo (2,5-3,5), 24,8% alto (>3,5) y 2,3% bajo
(<2,5). Se observó mayor cantidad de machos (53%) que hembras (47%). Se
observó, 15,2% de perros castrados, mayoritariamente hembras esterilizadas
(84,8%). La categoría perros adultos fue 77,2%, en 4 categorías: mantención <7
años (66,09%), geriátrico >7 años (27,9%), gestación (4,7%) y lactancia (1,3%). La
distribución de los biotipos fue grande (42,7%), biotipo pequeño (38,1%) y
mediano (19,2%). La dieta utilizada fue comercial completa (79,8%), mixta (16,9%)
y casera (3,3%). El consumo estimado de energía metabolizable (EM) (Kcal/kg0,75)
fue 189 ± 111 (pequeña), 143 ± 70 (mediana), 166 ± 88 (grande) y el consumo PC
(g/kg 0,75), en el mismo orden: 12 ± 7, 8 ± 5 y 10 ± 6. La frecuencia de alimentación
diaria fue: 2 (52,6%), 3-4 (21,2%), ad libitum (17,5%) y 1 (8,6%). Las diferencias
en la clasificación de ICC fueron explicadas por sexo (P=0,0173), etapa fisiológica
(P=0,0384) y biotipo (P=0,0236), en comparación con variables alimentarias: tipo
de dieta (P=0,24) y frecuencia de alimentación (P=0,46) y ambientales: tipo de
vivienda (P=0,50), frecuencia (P=0,64) y tipo de ejercicio (P=0,22). Futuras
investigaciones podrían buscar agrupaciones de variables de diferentes ámbitos
mediante estadística multivariante para desarrollar herramientas predictivas de
riesgo para la condición corporal utilizables en la anamnesis.